El 2021 fue un año agitado para todes. Seguíamos en pandemia, pero comenzamos a buscar formas de encontrarnos y de reunirnos (¡siempre con todas las medidas de bioseguridad!).
Ya que estás acá, gracias por acompañarnos ese año y seguir creciendo junto a nosotres este 2022. Durante el 2021 esbaratamos muchos prejuicios y estereotipos. En enero comenzamos a confeccionar otras prendas, como bucket hats.
Nunca antes habíamos hecho uno, pero siempre nos pedían e incluso amigues cercanos nos daban ideas. Luego de varios intentos dimos con el patrón correcto y creamos muchos diseños distintos: estampados, de colores planos, reversibles.
Los bucket hats fueron un éxito y son aún nuestra pieza más vendida. Para el 14 de febrero hicimos un pequeño sorteo, en el que la persona ganadora obtenía la pieza que quisiera, y eso fue exactamente lo que nos pidieron.
Más allá de solo hacer prendas, el activismo es una parte central de lo que somos en Esbaratao. Para el día de la mujer, organizamos una campaña en la que dimos a conocer los problemas y las luchas de las mujeres en el sector de la moda.
Aunque representan la mayoría de la mano de obra, su trabajo es el más invisibilizado y al que se le da menos valor. La mayoría de los cargos gerenciales están en manos de hombres, que nunca han sufrido discriminación en su área de trabajo y no conocen las entretelas de los talleres que dirigen.
Visibilizamos la situación de las mujeres en distintos países de América Latina y el mundo, mostrando ejemplos de cómo una comunidad organizada puede reclamar sus derechos y conseguir un ambiente de trabajo más respetuoso.
En abril cumplimos nuestro primer año, pues Esbaratao nació en la Semana de Fashion Revolution. Por eso, este mes fue de aniversarios y de luchas, colaborando con la campaña de este movimiento global, que nació luego del desplome del Rana Plaza, en Bangladesh.
Este suceso conmovió a la comunidad internacional y ayudó a crear conciencia sobre la explotación en la industria de la moda. Aunque no fue el único accidente que ocurrió en una fábrica de producción masiva, la presencia de marcas reconocidas mundialmente le dio mayor relevancia.
Más que prendas, queremos que aprendas
Aunque nuestro propósito inicial fue crear prendas con retazos, usando la técnica patchwork, poco a poco nos dimos cuenta de que lo más necesario era informar sobre estos problemas.
La concientización siempre estuvo presente en Esbaratao, pero a mediados del 2021 lo hicimos una parte central de lo que somos. En junio comenzamos nuestro Círculo de Lectura, leyendo y discutiendo sobre la explotación laboral.
Partimos de la Guía para vestir sin trabajo esclavo, de Albert Sales i Campos, para llegar a las formas particulares en que se configura la explotación en el sector textil en Venezuela.
Aquí, aunque no se encuentren fábricas para marcas internacionales como Nike o H&M, existe un tipo de fast fashion que se encuentra en franquicias locales o en mercados populares.
El Círculo de Lectura se volvió algo frecuente, con encuentros presenciales en el Restaurante Las Corocoras y virtuales por Google Meet cada sábado. Por cada tema escribimos una relatoría, donde condensamos los resultados de nuestras discusiones.
Este mismo mes comenzamos a realizar formaciones de moda sostenible, estilo personal y confección. A través de Google Meet hicimos el taller «Conociéndome, creando y cuidando el planeta», que reunió a personas de toda América Latina.
Las participantes aprendieron a reconocer su estilo, a combinar colores y texturas y a aprovechar al máximo una prenda para transformarla en algo nuevo.
El último encuentro fue especial, pues contó con la participación de mujeres que nos inspiran: Vilisa Morón, Sthefania del Valle y Aldeide Sánchez. Desde la biología, el arte y el upcycling, cada una de ellas apuesta por un futuro en el que nuestra relación con la ropa sea más armónica y sostenible.
En julio fuimos invitados al seminario «Lo personal es político: autonomía física y financiera de las mujeres en Venezuela», organizado por la Embajada Argentina. Ahí, pudimos mostrar nuestro trabajo junto a otras emprendedoras del país.
A través del Círculo de Lectura conocimos a muchas personas maravillosas. Lindys Vásquez, socióloga en formación y profesora del Instituto de Diseño de Caracas, nos invitó a dar una master class sobre moda sostenible a las estudiantes de diseño de moda.
Mima Cortez, a quien también conocimos en el Círculo de Lectura, se volvió parte de nuestra comunidad. Comenzamos con un live en Instagram, donde demostramos las costuras del racismo en Venezuela y cómo se esconde tras comentarios y comportamientos cotidianos. Lamentablemente, Instagram nos odia y no pudimos guardar el video🤡.
Poco después, Mima nos ayudó a transmitir mejor lo que somos de la mejor manera posible: cambiando nuestro logo y nuestra identidad gráfica. Esta nueva imagen la presentamos en septiembre, junto a nuestro sitio web, pues la mejor manera de expresarnos, conectar contigo y darle vuelta a todas las ideas que tenemos es a través de nuestros textos.
Luego del éxito de nuestro taller virtual decidimos realizar uno presencial, en los espacios de Café TECC. En este taller, llamado «Crea tu falda», aprendimos los fundamentos básicos del upcycling para transformar una camisa en una falda.
Ya habíamos estado en este lugar, gracias a la invitación de Clóset Circular CCS, y la onda de los cafés se extendió, pues poco después fuimos invitados a Ananda Green, donde participaron muchas marcas y organizaciones que apuestan por la sostenibilidad en Venezuela.
Las formaciones continuaron el resto del año, de forma virtual y presencial. El Grupo Social CESAP, que trabaja con personas de comunidades vulnerables en Caracas, nos invitó a dar una formación sobre moda sostenible para emprendedoras. De manera virtual, por otro lado, hicimos una formación de «Estilo Personal», que repetiremos este 2022😉.
Hacia finales de año, la organización Un Mundo Sin Mordaza nos invitó a participar en la campaña #AsíCuidamosVenezuela, con muchos eventos de concientización y sorteos con múltiples premios.
Por último, nuestro año terminó llevando Esbaratao a otra ciudad. Junto a Mima organizamos el evento Fashionismo Consciente, en San Diego, Valencia.
En el restaurante Semilla y Canto conversamos sobre moda local, feminismo e inclusión, y tuvimos la oportunidad de compartir con uno de nuestros referentes en la comunicación de moda: Constanza Rojas.
El año 2021 nos permitió crecer, ampliar nuestro equipo a pesar de la distancia y de algunos obstáculos, reconocer que más allá de nuestro entorno hay personas que creen en nosotres.
Cada paso que dimos fue un desafío porque nos preguntábamos si realmente lo estábamos haciendo bien. Pero al entender que hay distintas personas, emprendimientos y organizaciones que nos apoyan, sabemos que nuestras ideas tienen poder.
Este 2022 seguiremos creando y esperamos que sigas creyendo en nosotres. ¿Nos acompañas?
1 comments
Feliz de formar parte de este proyecto! <3 sigan así lqm