Drag is all over the world, it’s a phenomenon, y María Edilia, drag queen venezolana, es la prueba de esto. Representando al estado Aragua en Madrid, esta reina ha llevado su charisma, uniqueness, nerve and talent a espacios internacionales y hace un paralelismo entre su carrera y la de Maritza Sayalero, la primera venezolana en convertirse en Miss Universo.
El drag en Venezuela es un arte que se ha trabajado desde hace décadas, con referentes como Arona Backer, reconocida como la drag queen #1 de Venezuela, quien falleció en 2020 luego de casi 20 años de trayectoria; Chiky Lorens, quien fue animadora de La Bomba en Televén por varios años, siendo así la primera drag en animar un programa en televisión venezolana, y Ana Duque, actualmente viviendo en Perú, quien trabaja como imitadora de celebridades y participó en Buscando los Consagrados 2015 de Sábado Sensacional.
En la actualidad, gracias a la visibilidad de competencias drag en televisión, este método de expresión ha conseguido entrar en lo mainstream y volverse uno con la cultura pop, con nuevas reinas debutando a nivel nacional más seguido y con más personas interesadas en los shows drag venezolanos.
Ejemplos de artistas drag de los nuevos tiempos son: Miranda Campbell, Aisak, Drag Apolo Sweet, Malakhov Baby, y Sayfuck.
María Edilia inició su carrera drag en Venezuela hace dos décadas y sigue trabajando por poner a su país en el mapa con mucho orgullo, yendo desde Colombia a España mostrando sus shows y usando referencias venezolanas para crear espectáculos.
Fuera de su personaje encontramos a Edixon Calanche, de 41 años, quien nació en Maracay, estado Aragua. A sus 15 años se mudó junto a su mamá a La Grita, estado Táchira, en donde se graduó de bachillerato y poco después se fue a Mérida a estudiar Geografía en la Universidad de los Andes.
Al tercer semestre dejó la carrera para estudiar Diseño Gráfico en la misma universidad, de la cual se graduó y todavía sigue ejerciendo. Mientras estuvo en Mérida, también trabajó como maquillador.
Emigró de Venezuela a Colombia en 2015, y en el 2017 volvió a emigrar a Madrid, España, donde se encuentra en la actualidad.
¿Cómo fue tu primer acercamiento al arte drag y tu primera vez en drag?
Toda mi pasión por el drag empezó aproximadamente a mis 9 o 10 años. Mientras estaba en los 15 años de una prima, un señor que trabajaba con mi papá y mi tío como mesoneros hacía espectáculos que ahora entiendo eran espectáculos drag.
Este señor salió a hacer un show sorpresa durante la fiesta interpretando a Rocío Durcal. Mi tía le había hecho el vestido usando la misma tela de los manteles de la fiesta. Esa imagen quedó grabada en mí y me creó una fascinación por todo el tema de la transformación y los espectáculos.
Una vez que estuve en Mérida, ya en el 98 o 99, conocí a una artista que se llama Dana International, quién ganó el concurso de Eurovisión con su canción que se llama Diva, y yo decía que quería hacer un show de esta canción porque sentía la inquietud de experimentar con los espectáculos.
En Mérida había una discoteca llamada La Vía, en el Centro Comercial Mamayeya, donde hicieron un concurso de nuevos talentos. Decidí inscribirme y lo demás fue historia: no gané, quedé de segundo lugar, pero como era por rondas, ya para cuando llegamos a la final del concurso, yo estaba trabajando fijo como artista del local y ese fue mi inicio en el drag, en el año 2000, hace 23 años.
¿Quién es María Edilia, cuáles fueron tus inspiraciones para crear al personaje y cómo se diferencian y comparan Edixon y María Edilia?
El personaje nació de una necesidad de expresarme. María Edilia es el show que siempre había querido ver en otra persona, en este caso en otro artista drag, basado en mis gustos y en mis aficiones. Soy amante de la cultura pop, del old hollywood, de lo vintage, retro, de las villanas de telenovelas, de las películas de terror, de los videojuegos, de las reinas de belleza, entre otras cosas, entonces todo este background cultural que hay en mí es lo que nutre a María Edilia.
Ella es drama, es interpretación, es elegancia, es ironía, es color y al mismo tiempo oscuridad. A veces es muy niña, pero también es muy madura; es buena, pero a veces también es mala, se contradice. Eso es María Edilia, una explosión de carácter y emociones.
Sus inspiraciones vienen de todos esos elementos: eras del cine, eras de la moda, cantantes. Mucha gente cree que, porque el nombre de María Edilia viene dado por la de Protagonistas de Novela, el personaje está basado en ella, pero fue una casualidad, porque no sabía qué nombre usar y justo en ese momento (2002) se estaba transmitiendo ese programa.
El dueño de la discoteca en la que trabajaba me lo puso y se quedó. Ahora me encanta y me identifico mucho con él, y es otra casualidad que mi mamá también se llama Edilia.
Edixon y María Edilia se comparan principalmente en los gustos. Al comienzo ella nace de la necesidad de expresar y de ser fuerte, que en ese momento Edixon no era, mientras que María Edilia me daba toda la confianza que necesitaba.
Esto ocurre durante la época en la que empecé a salir a discotecas y salir con chicos. Tendía a ser un poco inseguro, entonces al montarme en drag me permitía llegar a sitios y ser conocida, tener una personalidad mucho más fuerte y con la cual acercarme a las personas.
Aunque para la edad que tenía eso me iba de cierta forma cobrando factura, porque iba perdiendo el norte y la realidad, pero ahora entiendo que es parte de un proceso y es un personaje que se crea con una intención y condiciones artísticas.
¿Cuál es tu opinión de la sociedad conservadora venezolana y cómo consideras que ha evolucionado? ¿Influenció tu drag de alguna forma?
Cuando yo empecé a hacer drag era una cuestión mucho más underground. Actualmente, veo que es mucho más abierta, pero hay mucho camino que hacer aún. Como gremio tenemos la costumbre de denigrarnos entre nosotros mismos.
Recuerdo que, cuando comencé, mucha gente se sorprendía porque yo hacía drag mientras estudiaba en la universidad y me decían que no tenía sentido, si yo iba a ser profesional, para qué iba a ser drag queen, porque se tenía la creencia de que ser travesti significaba estar en una mala vida o venir de una mala crianza. Pero he visto que eso ha cambiado un poco, y ahora es mucho mejor visto y se considera cool, tiene mayor amplitud social y visibilidad.
Me ayudó a ser fuerte y tener que decidir qué quería en la vida, porque en ese momento no sabía si era mejor dejar mi carrera o no. El drag me hacía faltar mucho a clases, pero me hizo madurar muy rápido y tener que hacerme responsable de mis cosas.
¿Cómo ha sido la recepción de tu familia hacia María Edilia?
Es un tema delicado: a mi mamá no es que no le guste, pero tampoco le encanta. Lo importante es que me respeta. Con María Edilia entendí que es completamente válido mi trabajo como drag, es respetable y que no debe darme nada de vergüenza, y que para hacer drag bien hay que ser responsable, tener criterio y talento, entonces tienes que respetar lo que haces tú para poder respetar lo que hago yo.
Hoy en día lo acepta mucho más y, aunque todavía no ha visto mis shows porque estamos en sitios distintos. Ojalá pronto pueda.
¿Cómo representas tus orígenes venezolanos por medio de tu drag?
Con mis shows. Estos son muy variados y tienen mucho que ver con la comedia. Introduzco muchas veces cosas del entorno popular venezolano, audios de telenovelas, de comerciales de televisión, y como entre canción y canción, aprovecho para hablar con el público cuando hay latinos o venezolanos, busco enaltecer el hecho de que soy venezolana y tuve la oportunidad de llegar a un país como España en búsqueda de mis sueños.
Siempre con mucho orgullo y diciendo que obviamente soy venezolana, por eso soy tan guapa.
¿Cómo era la escena drag venezolana cuando empezaste y de qué forma se compara a la actual?
En ese entonces en Venezuela se hacía mucho lo que es la imitación de personajes, los dobles de caracterización y siempre ha habido un estilo muy de reinas de belleza, elegante y tirando a lo que es «el ideal de una mujer». A mí me tomaban más como drag queen porque siempre fui como más exagerada a como era el drag en ese momento.
Hoy en día veo que ha evolucionado y se ha diversificado mucho, hay muchos tipos de drag adaptados a los nuevos tiempos y sigue avanzando muy rápidamente y siguen habiendo muy buenos referentes y muy buen drag en Venezuela.
En España hay muchas drags venezolanas que son muy buenas como: Coco Luna, Krystal Forever, Arepita Diablitos, Wayúu Queen, Gala Von Rich y Mariana Stars.
¿Qué tan importante crees que es la representación de drag venezolana, latina e hispanohablante a nivel internacional?
Como migrante, al comienzo tenía esa mentalidad de «somos más que la situación del país» o de «somos más o mejores que esto y aquello». Pero al final, cuando sales de tu país, te das cuenta de que eso está en tu ADN, y es muy cierto que se necesitan y son muy importantes los referentes, quizás como yo. Que la palabra referente suena como wow, pero en el sentido de que puedes salir, expresarte y ser tú mismo sin dejar de ser venezolano.
Hay muchas cosas que siempre recordamos de la cultura venezolana. Yo siempre canto cositas como «ven, comparte y disfruta, navidades Plumrose» o «puedes pasar con confianza». Son cositas que están con el venezolano, como Maite Delgado y su «buenas noches, poliedro».
También es muy importante que la gente también vea que se haga realidad, porque todo es como idílico. De hecho, yo quiero llamar a mis fans así, Edílicos, porque creo que las cosas y los sueños se hacen realidad trabajando. Tienes que atreverte, salir de tu zona de confort, y tienes que comerte las verdes 10.000 veces para poderte comer las pintonas, porque no voy a decir que ya me estoy comiendo las maduras.
Al menos ya el camino se empezó y soy la Maritza Sayalero del transformismo venezolano. Ojalá la gente se sienta inspirada, no solo en el drag, sino en todo lo que se propongan.
¿Cuáles son las expectativas o metas a futuro que tienes para María Edilia y su creciente plataforma?
Me gustaría hacer muchas cosas. Yo soy muy actriz, muy presentadora, muy chica del tiempo, muy ancla de noticias. Quisiera expandirme de las discotecas y probar cosas nuevas. Yo quiero una Barbie con mi nombre, una línea de ropa interior, una arepa bautizada, una calle en Venezuela, todas esas cosas las quiero.
¿Cuáles son tus sentimientos sobre la situación actual de Estados Unidos en relación con el drag y las leyes siendo propuestas y promovidas para prohibir el drag y otras formas de arte que incluyan transformismo? ¿Consideras que podría llegar a tener un impacto a nivel mundial?
Diré una frase de Los Juegos del Hambre que dice «remember who the real enemy is». Yo creo que es terrible que se siga señalando a la comunidad LGBTIQ+, y no solo a estxs, porque el drag no necesariamente tiene que corresponder a una orientación sexual o identidad de género, porque el drag es una expresión artística.
Entonces que se limite la manera de cómo los artistas nos podemos expresar me parece terrible. Mucho peor es que se esté haciendo ver a nuevas generaciones que el drag es algo amenazante. Pero, ¿para quién lo es? ¿Religiones? ¿Estratos sociales? ¿Niños?
Es decepcionante, y espero que no pase a mayores, porque con la condición en la que está el mundo, no creo que el objetivo debería estar en el drag. No tiene sentido.
¿Qué mensaje le das a las personas que leerán la entrevista?
Que luchen por sus sueños y sigan adelante, que parece frase de cajón, pero los sueños se hacen realidad con trabajo, esfuerzo y dedicación. Que nada cae del cielo y que hay que trabajar sin joder al de al lado.
Afortunadamente, en Venezuela el arte drag actual tiene la oportunidad de hacerse más visible por medio de redes sociales. Las pioneras del drag crearon sus plataformas en clubs y discotecas locales y muchxs de lxs fans de este medio artístico no tienen amplio conocimiento de quiénes fueron los íconos a quienes se les debe respeto, reconocimiento y agradecimiento.
Ahora tenemos a referentes como María Edilia, con una larga trayectoria y un estilo de drag inspirado en lo old school, expandiendo los límites de los escenarios en los que pueden estar las reinas venezolanas.
Las organizaciones LGBTIQ+ como Tu País Plural, Movimiento Somos y Okay No han sabido usar a las nuevas drags como método de protesta y activismo. La organización Somos abrió en Mérida el primer centro comunitario LGBITQ+ de Venezuela, en donde crearon una iniciativa llamada Drag School para formar a artistas drag venezolanos con una visión de activismo y liderazgo.