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Fotos: Mima Cortez

Justicia Climática en Venezuela: un llamado a la conservación ambiental

El pasado 25 de marzo fue el Día Mundial de la Huelga Climática. Miles de activistas se movilizaron en todo el mundo, para exigir a los gobiernos y a las grandes empresas que ayuden a frenar el cambio climático.

Distintas organizaciones nos movilizamos por la justicia climática en Venezuela, con encuentros en varios estados del país. La actividad estuvo organizada por Todos por el Futuro, junto a Fridays For Future Venezuela.

La crisis climática es consecuencia de la producción acelerada de CO2 desde el sector industrial, aunado a la deforestación y la contaminación de los ecosistemas.

Esto acelera el proceso de calentamiento global, que ocurre naturalmente en nuestro planeta, pero a un ritmo menor. Muchas zonas alrededor del mundo ya se ven afectadas por este proceso, debido a inundaciones, sequías extremas, huracanes y tormentas tropicales.

En Venezuela también nos hemos visto afectados por este fenómeno. El calentamiento global ha acabado con nuestros glaciares, las lluvias excesivas han afectado nuestros cultivos y las tormentas han desplazado a familias de sus hogares.

La pobre infraestructura y urbanismo de nuestras zonas rurales vuelve más vulnerables a estas comunidades, que tienen menos acceso a los mecanismos adecuados de prevención.

La extracción de minerales y la construcción de viviendas en parques nacionales y zonas protegidas, los constantes derrames petroleros y los incendios en áreas forestales también contribuyen a la crisis climática en el país.

Por esto es tan urgente el llamado que hacen lxs activistas y organizaciones locales por la conservación y la implementación de medidas contra el cambio climático.

En Caracas nos movilizamos desde la plaza Bélgica, en Altamira, hasta la plaza Brión, en Chacaíto. Gracias a la organización Plantados Caracas comenzamos sembrando un apamate en el municipio Chacao.

Durante el recorrido a Chacaíto monitoreamos los árboles de la zona, evaluando su estado, cuántos habían sido podados o talados y en qué zonas podrían sembrarse más ejemplares.

Al terminar el recorrido presenciamos varias actividades culturales. El Grupo de Trabajo Mujeres, Cuerpos y Territorios realizó el performance Yo Oro Lloro, de Malu Valerio, donde condenan el extractivismo y el sistema neoliberal, que pone las ganancias por sobre la vida de las personas.

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Performance Yo Oro Lloro, interpretado por el Grupo de Trabajo Mujeres, Cuerpos y Territorios. Foto: Mima Cortez.

Siguió nuestro performance Moda X el Futuro. Caminamos, manifestamos y alzamos nuestra voz en contra de la industria global de la moda.

Gracias a la colaboración de 8 talentos y 2 marcas locales demostramos la importancia de la moda local, diversa e inclusiva en nuestra sociedad.

Cerramos con la lectura de nuestro manifiesto y la convocatoria abierta a intercambiar las prendas que ya no usamos, para darles una nueva vida junto a otra persona.

La jornada cerró con el canto de Robzaida Marcos, de El agua que nos une. La artista entonó canciones tradicionales de Venezuela, con mensajes en pro de la conservación ambiental.

Karina Estraño, de Todos por el Futuro, expresó que:

Logramos la participación de más de 30 organizaciones de la sociedad civil en varias ciudades del país, especialmente el 25 y 26 de marzo. Cada una de estas organizaciones recurrió a la creatividad y, utilizando diferentes lenguajes, transmitimos nuestro mensaje por la protección de nuestros derechos ambientales, en medio de la crisis que vivimos en Venezuela.
Karina Estraño
Todos por el Futuro
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